Mini-entrada

Hola a tod@s! He estado consultando las estadísticas. Me parece un gran invento esto de internet, ya que podemos comunicarnos con gente de todo el mundo. Pues imaginaros cuál ha sido mi sorpresa cuando he visto que el público potencial de este blog es...

martes, 26 de febrero de 2013

Imagen de la semana - El Taj Mahal


El taj Mahal siempre me ha parecido impresionante. Esta en la india, pero algún dia me gustaría poder ir ha verlo

La supuesta "chuleta" (1ª parte)

     Estaba paralizada. Como iba ha decirle a mi madre que el profesor había pensado que tenía una chuleta y me había quitado el examen? Hacía rato que había llegado a casa. Mi madre, como siempre, había ido a dejar a mi hermana al colegio.
     No sabía si mi madre estaba de buen humor o no, esperaba que si. Había ensayado mientras comía como decirselo, pero de todas las maneras posibles, me había parecido patético decirle que después de tanto estudiar, me habían quitado el examen de las narices porque había un papelito tirado a mi lado.
     Mi madre estaba en el salón, y yo parada en medio del pasillo. Faltaban 15 minutos para que ella tuviera que volver a por mi hermana al colegio, tenía que contarselo ya, porque si estaba mi hermana, lo iba ha empeorar.
     Sonaba el teléfono. Me fui sin hacer ruido a mi habitación. Mi madre estaba tardando mucho. Barajé otras posibilidades de contarselo, como mandarle un whatsapp. Enseguida descarté la idea, porque a lo mejor en ese mismo momento yo no sufría las consecuencias, pero al final puede que se enfadara más.
     Mi madre por fin colgó el teléfono y volvió al salón. Era momento de actuar, ahora o nunca. Decidí hacer como si nada y hablar con naturalidad, como quitandole importancia. Fui andando despacio, antes de entrar, me paré en el pasillo, como para darme ánimos. Me senté con el ordenador, mi madre miraba el reloj, tenía que decirselo.
    Que tal el examen? Sabía que me lo estaba diciendo a mi, pero como me habia puesto los cascos, finjí que no la había oído. No me lo repitió, cogió el abrigo y se fue a por su bolso. Sabía que tenia que decirselo, pero no me salían las palabras. No me atrevía a abrir la boca. Primero, pensé en que era lo peor que podía pasar : 1-Que me creyera y confiara en que no me habia hecho una chuleta, pero que fuera a hablar con el profesor y la liara o 2- que no me creyera y que me castigara más de un mes.
    Por fin, me atrevía ha hablar. Pasara lo que pasara, ya no había vuelta atrás. Intenté parecer tranquila y confiada: -mamá...

Esta historia es totalmente falsa, y la escribo con el fin de aprender a describir este tipo de situaciones en mi historia: El reloj de Carlín