Esta mañana he leído el origen de la flauta de pan o siringa. Es una leyenda. Todos sabemos que los griegos atribuian a todo lo que no entendían a los dioses y muchas leyendas las inventaron ellos.
Cuenta la leyenda, que Pan era un hijo de Zeus. Este era gordito, con pelo y pezuñas y por eso, Zues nunca le reconoció como su hijo.
Pan era feliz en el campo cuidando de sus ovejas. Estaba locamente enamorado de una ninfa llamada Sirinx (de ahí siringa).
Un día, se lanzó en su persecución, y ella, asustada, rogó ayuda a los dioses del olimpo. Estos atendieron sus súplicas y la convirtieron en unos juncos a la orilla de un lago.
Pan, triste, cortó los juncos para hacerse una flauta. Tocaba con ella tristes melodías y en su sonido se apreciaba todavía la dulce voz de la ninfa...
A mi siempre me han interesado mucho todas estas cosas de las leyendas, los dioses griegos, las creencias de antiguamente y en general el origen de las cosas. Así que no os extrañe ver más entradas de este tipo.
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